Esta escultura cautiva con círculos entrelazados de metal, simbolizando la conexión y la continuidad. Reposando sobre una sólida peana de piedra, la obra emana una esencia femenina y maternal, sugiriendo una delicada danza entre la fortaleza y la ternura. Sus huecos estratégicos añaden un toque de misterio, invitando a la contemplación. Una pieza que no solo embellece tu espacio, sino que también evoca emociones y narrativas, haciendo de esta escultura un regalo único y con significado para aquellos que aprecian la belleza en la simplicidad y la complejidad.

Medidas: 

Alto: 45cm

Ancho: 27cm

Fondo: 20cm